El tributo a Los Redondos hizo vibrar la noche del sábado en La Casona

Este sábado, se presentó el tan esperado Tributo a Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, en el Centro Cultural “La Casona”, de la mano de dos bandas de altísimo nivel y con una sala llena. El ambiente que se generó en el lugar hizo que la noche sea inolvidable.









Rock | Con la presencia de más de 250 personas

Eran las diez y media de la noche en el Centro Cultural “La Casona”. Se podían observar los pasillos del lugar repletos de gente que venía a ver el show, a disfrutar de una noche de buen rock. Entre ellos, algunos identificados con remeras que tenían el logo de Los Redondos o con alguna referencia al que fuera su cantante: el Indio Solari.

La hora se acercaba y los músicos se congregaron en una de las salas del lugar. Tocando la guitarra acústica, en un ambiente festivo, expresaban su ansiedad y expectativa por el show. Muchas emociones se entremezclaban, iban a hacer un tributo a lo que para muchos de ellos fue la banda que los marcó musicalmente, Los Redondos, aquella mítica banda que aún apasiona a centenares de miles de personas. Todo eso iba a ocurrir esa misma noche, allí mismo.

Ya eran las once y cada vez había más público. Los músicos deciden subir a tocar, Gualicho se prepara para iniciar el show. Más de dos centenares de personas coreaban “¡Vamos los Redondos! ¡Vamos los Redondos!”. Comienza a sonar “El pibe de los astilleros” y es el punto de inicio de lo que sería una noche increíble.

Gualicho, la banda tributo que abrió el show, está compuesta por Juan “Meija” Meijide en voz, Diego Gonzalez en batería, Diego Canosa en bajo, Esteban Bareille y Santiago Echeverria en guitarra, y Ricardo Yema en Saxo.

El show prosiguió con canciones “Un ángel para tu soledad”, “Ropa Sucia” y “Vencedores Vencidos” que hicieron vibrar al público que copaba La Casona, en un ambiente festivo y con mucho rock. Mientras tanto, la banda continuaba demostrando todo su potencial arriba del escenario, haciendo una impecable interpretación de “Un poco de Amor Francés” y “Queso Ruso”.

Gualicho tocó “Todo un Palo” marcando un punto de quiebre antes de terminar el show con “Jijiji”, donde el pogo más grande del universo llegó a la ciudad de Tres Arroyos por un momento, dando un final con mucho rock y superando las expectativas con creces.

Los cinco minutos de espera entre shows se vieron colmados de expectativa y ansiedad. Los músicos suben al escenario. La banda estaba conformada por Nicolás Troncoso y Flor Gómez en las voces, "Ruso" Herrera en batería, Hernán Lupardo en bajo, "Pato" Rivolta en guitarra, Juan Videira en el teclado y Leo Perez en el saxo.

Comenzaron su performance de la mejor manera: desarrollando una excelente versión de "La hija del fletero" que fue ovacionada por el público. Continuando, interpretaron canciones como "Superlógico", "Esa estrella era mi lujo" y "Tarea Fina" donde plasmaron de la mejor manera una de la facetas más crudas de la esencia ricotera.

"Masacre en el puticlub", "Maldición va a ser un día hermoso" y "Mariposa Pontiac" fueron los últimos temas de la presentación del segundo conjunto, en una noche para el recuerdo. Aunque, ante el pedido del público, la banda interpretó "Jijiji" por segunda vez en la noche, invitando a Juan Meijide, cantante de Gualicho, para subirse al escenario y culminar así con broche de oro esta presentación de primer nivel, con un impresionante pogo de las más de dos centenares de personas presentes.